Boca y Boxing repartieron puntos en un clásico muy esperado por el hincha del fútbol. Interesante en lo táctico, emotivo por lo que pusieron los veintidós protagonistas y emocionante hasta el minuto final porque el resultado pudo ser para cualquiera, especialmente en los últimos diez minutos.
Fotos: Romina Barrientos. Texto: Alfredo Galvez
Fotos: Romina Barrientos. Texto: Alfredo Galvez
David Rogel, el árbitro del partido, tuvo, con errores y aciertos, un primer tiempo de aceptable para arriba. Pero cambió radicalmente en la segunda parte y tuvo, puntualmente en los veinte finales una actuación para el olvido. Expulsados, agresiones, chamullos y manoseos por doquier fueron el cierre de el primer capitulo de una historia pactada a dos.
El partido esta previsto para las tres de la tarde, pero como el día lo permite y a sabiendas de antemano que el clásico de hoy es más que prometedor me voy arrimando al sintético del ABC casi una hora antes. Solo pasaron unos minutos para que tanto Boca como Boxing, salieran al campo para el precalentamiento previo. Curiosamente ambos equipos coincidían en cuanto a cambios, Boxing pone a Simoes como marcador de punta por izquierda en reemplazo de Eduardo Aguilar y el hueco dejado por Abel era ocupado por el joven Matías Bórquez.
Boca manda al diablo ese dicho de que “equipo que gana no se toca” y el “Tigre” Rodríguez va al banco en el arranque, porque hoy la nueve es para José Quiroga, el tan “mentado” Pepe gol.
El xeneize estrena pilcha oficial (Recordemos que había usado la alternativa) azul y oro con número blancos, mientras que Boxing aparece en campo con la tradicional albiverde, en listones verticales.
David Rogel, Juan Navarro y Mariela Puche, los tres de furiosa casaca roja, componen el tridente arbitral. El hincha boquense a colmado la tribuna de Santa Fe y Rivadavia. Boxing se ha apropiado de la popular que da hacia Santa Fe y San Martín.
Colorido, bochinche, banderas, papelitos multicolores, en fin, todo el folclore que al menos a mi me sacan una sonrisa de placer y casi como un murmullo se me escapa un “Bienvenido Fútbol”
Con el pitazo de Don David, Boxing en el toque de Mariano Matus, arranca el clásico.
Si bien es cierto que con los nombre que tallan en cada equipo uno piensa que son unos “nenes” que “mama mía”.Yo debo mirar en la trastienda de cada uno. Y cada técnico tiene su propuesta, su táctica, donde como en el ajedrez cada pieza tiene su función y donde cada movimiento ha sido pensado en función del rival.
Rapalín, ganador en el último Boxing-Boca oficial en este mismo escenario, hizo por aquel entonces un dibujo táctico interesantísimo, que llevado a la practica le salió perfecto. Pero partidos son partidos y muchos de aquellos hombres hoy no están para este encuentro. Pone a Sandoval y Márquez por la zona media para interrumpir el circuito que normalmente propone el albiverde en esta zona.
Ceballos y Leandro Fernández van por afuera por derecha e izquierda con “enroque” incluido entre ellos. D´Augero casi como haciéndole honor al diez que tiene en su camiseta, si bien aparece como punta, baja llamativamente varios metros y pivotea delante de ese cuarteto xeneize.
Quiroga libre arriba, por lo que va sin escalas de derecha a izquierda y suele aparecer además por el centro. Los cuatro del fondo en iguales funciones que ante el Cóndor, pero hoy con una salvedad: los extremos Lucas Fernández y Víctor Manchafico no tienen tanta proyección, si bien suben unos metros, rara vez traspasan la línea que divide ambos territorios.
Boxing de la mano de Gargaglione, creo no va a sorprenderme, deduzco toque y rotación en la zona media, pelota al piso, marcación en zona con los del fondo y Julián desbordando por derecha para levantar centros a Matus que aparecerá como el típico nueve. Pero Don Carlos, al menos a mí me sorprende.
Pone marca personal sobre Quiroga y para esta función lo asigna a Bórquez. “Vos lo seguís hasta debajo de la cama” le habrá dicho el DT, y Matías cumplió a rajatabla esta función.
Entre Corti Ojeda y Richard Bazan se turnaban en la marca de D´Augero y cuando Ariel se volcaba hacia su izquierda aparecía Diego Jancich como rueda de auxilio. En el ajedrez la “torre” suele ser una pieza que comienza ubicada en una esquina en función de defensa de su reina, pero como el juego lo permite puede avanzar en línea vertical hacia delante y hacia atrás y generalmente cuando esto sucede deja el “desparramo”.
Bueno piense Ud en Abel Simoes como la torre por izquierda. Arranca bien atrás, en defensa pero a los pocos minutos empieza a trepar por su sector y empieza el desparramo, porque su velocidad y dominio de pelota lo pone en un abrir y cerrar de ojos primero como carrilero y casi al toque se convierte en punta, toca y va .Arriba se junta con el Noni Toledo y Triviño y la triangulación por historia vista en zona media hoy se traslada al sector izquierdo y en ataque.
Víctor Manchafico se desdobla y deben acudir refuerzos a la zona, Ceballos o Leandro junto a Pedevila tienen hoy mucho más laburo que el domingo anterior.Matus es otra variante, porque Mariano baja unos metros se acopla a los del medio y descarga en Medina que busca aprovechar la velocidad que por derecha impone Julián Ojeda. Acá la cosa fue repartida, porque Julián ganó y perdió con la marca de Lucas Fernández. Justamente en uno de esos desbordes, Julián gana dentro del área y cuando se presta a partir el remate con destino de gol, Lucas lo toma, casi lo da vuelta en lo que fue un evidente y claro penal que Rogel desestimó ante las protestas de todo Boxing.
Boca igualmente fue ganando la pulseada en cuanto al dominio y tenencia de pelota, y cuando supo trepar por izquierda y llegar con pelotazos cruzados empezó a complicar. Leandro Fernández desde fuera del área de zurda la pone cerquita del vértice izquierdo de Maxi Gómez que ya estaba vencido. D´Augero ante la salida de Maxi la alcanza a tocar pero sin dirección y se va cerca. El xeneize le metió cuatro tiros de esquina como ametralladora, uno detrás de otro, pero a contracara Jancich se lo perdía cuando ante una errónea salida de Martínez le mete una chilena que de convertirla era un golazo.
Cuatro amonestados en Boca, ninguno en Boxing era la estadística disciplinaria que dejaba la etapa, con un Rogel al que podía achacársele el penal no cobrado contra Julián pero que en líneas generales llevaba las riendas del partido.
En el complemento todo cambió, Boxing se plantó mas decidido en ofensiva, Medina subió unos metros y Julián empezó a ir con pelota dominada desde derecha al centro y a Lucas le empezó a costar la marca, porque lo agarraba a contra pierna. Matus dilapida la más clara chance de gol, cuando tras recibir dentro del área le tira un sombrero a su marcador, y cuando la regla dice “matar” al arquero, se demora y decide un pase hacia atrás, relegando una chance inmejorable. Simoes ya era casi un habitué en sus subidas por izquierdas y Boca ahora apuntaba más a la contra, pero le costaba por el centro donde Bazan y Ariel Ojeda eran infranqueables, sin embargo no todo siempre sale perfecto, y D´Augero tiene su chance, pase a espaldas de los centrales y Ariel que encara, sale Maxi es mano a mano, el vikingo la quiere poner sobre la cabeza del uno local, y este se lo lleva puesto, enorme penal, tan penal como el comentado en la primera parte. Y tan erróneo Rogel también en esta en no sancionarlo “Sin no cobre aquel…no puedo cobrar este” Y vienen los cambios. Pepegol se va y entra Espeche, afuera Ceballos adentro el sanjuanino Fernández por Boca, Afuera Matus adentro Maldonado, viene Chávez se va Triviño. Esto mencionado así, cambio por cambio sin tomar de mi parte el tiempo y momento de ingreso de cada uno. Pero si debo hacer hincapié en el ingreso del Mago Chávez, que nunca oculté en ningún escrito el encanto que me da verlo jugar.
Ingresa sobre los veintiséis minutos recibe casi de inmediato la bola, caño para uno gambeta para otro en mitad de cancha y encara en línea recta, al cruce va Jorge Olguín, fuerte el cruce como fuerte es la infracción, que Rogel sanciona de inmediato. Pero Maxi reacciona y se le va a las barbas a Jorge, y empujón va empujón viene, guapo contra guapo y la roja de don David flamea por los aires para ambos, mientras en otro rincón (Si bien es termino boxístico) Medina y Sandoval se atendían en un pleito aparte y personal, lo vieron todos salvo los que debían verlo, y ahí empezó el derrumbe de Rogel, lo que en la primera parte eran faltas comunes y se cobraban como tal, ahora eran severamente sancionadas con amarillas, lo que fueron encontronazos y valía el siga siga, ahora si decías “mancha” te cobraban falta, y ya que estamos dijo el Noni, y se le fue con los dos pies hacia delante sobre Lucas Fernández y no quedaba otra que roja y ahora eran diez por nueve. Curiosamente ni Boca ni Boxing daban la sensación de conformarse con el empate, porque Boca de la mano del Sanjuanino con un toque distinto si se quiere empezó a dibujar por izquierda, secundado por Espeche, el Tigre que ya estaba en cancha, al ver a un Rogel tan “sacado” no protestaba ni una.
Jugada por derecha de Boxing lo bajan a un hombre albiverde, Rogel que no sanciona, la jugada sigue curso cerca de los bancos, Jancich va al piso, y Rogel pita falta, Gargaglione que de un salto ingresa al campo reclama airadamente al juez, este lo expulsa de inmediato, pero el técnico albiverde esta fuera de sí, Don Carlos se descontrola y hay agresión ya el partido se le ha ido totalmente de las manos al arbitro, Tito Velazquez, sigue el mismo camino de vestuario, cuando Rogel lo agrega a su lista de expulsados. Hay una chance más para Boxing en un ataque de Julián Ojeda por izquierda y hay una inmejorable ocasión desperdiciada por el sanjuanino Fernández para Boca, segundos antes que Rogel pitara el final.
Se van masticando bronca, los dos quisieron ganarlos, y eso es bueno, ninguno salió a especular, cada uno con sus planteos, cada uno con sus armas, validas todas.
Pudo ser para Boca, pudo ser para Boxing, ambos pusieron todo, con errores y virtudes.
El cambio radical de Rogel en la segunda parte, complico la vida de todos, ha tenido tardes buenas Rogel debo reconocerlo, como no puedo engañarme ni engañarlo a Ud señor lector, hoy Don David Rogel…. Tuvo una tarde de perros.
LA QUIMERA DE SANTA CRUZ
El partido esta previsto para las tres de la tarde, pero como el día lo permite y a sabiendas de antemano que el clásico de hoy es más que prometedor me voy arrimando al sintético del ABC casi una hora antes. Solo pasaron unos minutos para que tanto Boca como Boxing, salieran al campo para el precalentamiento previo. Curiosamente ambos equipos coincidían en cuanto a cambios, Boxing pone a Simoes como marcador de punta por izquierda en reemplazo de Eduardo Aguilar y el hueco dejado por Abel era ocupado por el joven Matías Bórquez.
Boca manda al diablo ese dicho de que “equipo que gana no se toca” y el “Tigre” Rodríguez va al banco en el arranque, porque hoy la nueve es para José Quiroga, el tan “mentado” Pepe gol.
El xeneize estrena pilcha oficial (Recordemos que había usado la alternativa) azul y oro con número blancos, mientras que Boxing aparece en campo con la tradicional albiverde, en listones verticales.
David Rogel, Juan Navarro y Mariela Puche, los tres de furiosa casaca roja, componen el tridente arbitral. El hincha boquense a colmado la tribuna de Santa Fe y Rivadavia. Boxing se ha apropiado de la popular que da hacia Santa Fe y San Martín.
Colorido, bochinche, banderas, papelitos multicolores, en fin, todo el folclore que al menos a mi me sacan una sonrisa de placer y casi como un murmullo se me escapa un “Bienvenido Fútbol”
Con el pitazo de Don David, Boxing en el toque de Mariano Matus, arranca el clásico.
Si bien es cierto que con los nombre que tallan en cada equipo uno piensa que son unos “nenes” que “mama mía”.Yo debo mirar en la trastienda de cada uno. Y cada técnico tiene su propuesta, su táctica, donde como en el ajedrez cada pieza tiene su función y donde cada movimiento ha sido pensado en función del rival.
Rapalín, ganador en el último Boxing-Boca oficial en este mismo escenario, hizo por aquel entonces un dibujo táctico interesantísimo, que llevado a la practica le salió perfecto. Pero partidos son partidos y muchos de aquellos hombres hoy no están para este encuentro. Pone a Sandoval y Márquez por la zona media para interrumpir el circuito que normalmente propone el albiverde en esta zona.
Ceballos y Leandro Fernández van por afuera por derecha e izquierda con “enroque” incluido entre ellos. D´Augero casi como haciéndole honor al diez que tiene en su camiseta, si bien aparece como punta, baja llamativamente varios metros y pivotea delante de ese cuarteto xeneize.
Quiroga libre arriba, por lo que va sin escalas de derecha a izquierda y suele aparecer además por el centro. Los cuatro del fondo en iguales funciones que ante el Cóndor, pero hoy con una salvedad: los extremos Lucas Fernández y Víctor Manchafico no tienen tanta proyección, si bien suben unos metros, rara vez traspasan la línea que divide ambos territorios.
Boxing de la mano de Gargaglione, creo no va a sorprenderme, deduzco toque y rotación en la zona media, pelota al piso, marcación en zona con los del fondo y Julián desbordando por derecha para levantar centros a Matus que aparecerá como el típico nueve. Pero Don Carlos, al menos a mí me sorprende.
Pone marca personal sobre Quiroga y para esta función lo asigna a Bórquez. “Vos lo seguís hasta debajo de la cama” le habrá dicho el DT, y Matías cumplió a rajatabla esta función.
Entre Corti Ojeda y Richard Bazan se turnaban en la marca de D´Augero y cuando Ariel se volcaba hacia su izquierda aparecía Diego Jancich como rueda de auxilio. En el ajedrez la “torre” suele ser una pieza que comienza ubicada en una esquina en función de defensa de su reina, pero como el juego lo permite puede avanzar en línea vertical hacia delante y hacia atrás y generalmente cuando esto sucede deja el “desparramo”.
Bueno piense Ud en Abel Simoes como la torre por izquierda. Arranca bien atrás, en defensa pero a los pocos minutos empieza a trepar por su sector y empieza el desparramo, porque su velocidad y dominio de pelota lo pone en un abrir y cerrar de ojos primero como carrilero y casi al toque se convierte en punta, toca y va .Arriba se junta con el Noni Toledo y Triviño y la triangulación por historia vista en zona media hoy se traslada al sector izquierdo y en ataque.
Víctor Manchafico se desdobla y deben acudir refuerzos a la zona, Ceballos o Leandro junto a Pedevila tienen hoy mucho más laburo que el domingo anterior.Matus es otra variante, porque Mariano baja unos metros se acopla a los del medio y descarga en Medina que busca aprovechar la velocidad que por derecha impone Julián Ojeda. Acá la cosa fue repartida, porque Julián ganó y perdió con la marca de Lucas Fernández. Justamente en uno de esos desbordes, Julián gana dentro del área y cuando se presta a partir el remate con destino de gol, Lucas lo toma, casi lo da vuelta en lo que fue un evidente y claro penal que Rogel desestimó ante las protestas de todo Boxing.
Boca igualmente fue ganando la pulseada en cuanto al dominio y tenencia de pelota, y cuando supo trepar por izquierda y llegar con pelotazos cruzados empezó a complicar. Leandro Fernández desde fuera del área de zurda la pone cerquita del vértice izquierdo de Maxi Gómez que ya estaba vencido. D´Augero ante la salida de Maxi la alcanza a tocar pero sin dirección y se va cerca. El xeneize le metió cuatro tiros de esquina como ametralladora, uno detrás de otro, pero a contracara Jancich se lo perdía cuando ante una errónea salida de Martínez le mete una chilena que de convertirla era un golazo.
Cuatro amonestados en Boca, ninguno en Boxing era la estadística disciplinaria que dejaba la etapa, con un Rogel al que podía achacársele el penal no cobrado contra Julián pero que en líneas generales llevaba las riendas del partido.
En el complemento todo cambió, Boxing se plantó mas decidido en ofensiva, Medina subió unos metros y Julián empezó a ir con pelota dominada desde derecha al centro y a Lucas le empezó a costar la marca, porque lo agarraba a contra pierna. Matus dilapida la más clara chance de gol, cuando tras recibir dentro del área le tira un sombrero a su marcador, y cuando la regla dice “matar” al arquero, se demora y decide un pase hacia atrás, relegando una chance inmejorable. Simoes ya era casi un habitué en sus subidas por izquierdas y Boca ahora apuntaba más a la contra, pero le costaba por el centro donde Bazan y Ariel Ojeda eran infranqueables, sin embargo no todo siempre sale perfecto, y D´Augero tiene su chance, pase a espaldas de los centrales y Ariel que encara, sale Maxi es mano a mano, el vikingo la quiere poner sobre la cabeza del uno local, y este se lo lleva puesto, enorme penal, tan penal como el comentado en la primera parte. Y tan erróneo Rogel también en esta en no sancionarlo “Sin no cobre aquel…no puedo cobrar este” Y vienen los cambios. Pepegol se va y entra Espeche, afuera Ceballos adentro el sanjuanino Fernández por Boca, Afuera Matus adentro Maldonado, viene Chávez se va Triviño. Esto mencionado así, cambio por cambio sin tomar de mi parte el tiempo y momento de ingreso de cada uno. Pero si debo hacer hincapié en el ingreso del Mago Chávez, que nunca oculté en ningún escrito el encanto que me da verlo jugar.
Ingresa sobre los veintiséis minutos recibe casi de inmediato la bola, caño para uno gambeta para otro en mitad de cancha y encara en línea recta, al cruce va Jorge Olguín, fuerte el cruce como fuerte es la infracción, que Rogel sanciona de inmediato. Pero Maxi reacciona y se le va a las barbas a Jorge, y empujón va empujón viene, guapo contra guapo y la roja de don David flamea por los aires para ambos, mientras en otro rincón (Si bien es termino boxístico) Medina y Sandoval se atendían en un pleito aparte y personal, lo vieron todos salvo los que debían verlo, y ahí empezó el derrumbe de Rogel, lo que en la primera parte eran faltas comunes y se cobraban como tal, ahora eran severamente sancionadas con amarillas, lo que fueron encontronazos y valía el siga siga, ahora si decías “mancha” te cobraban falta, y ya que estamos dijo el Noni, y se le fue con los dos pies hacia delante sobre Lucas Fernández y no quedaba otra que roja y ahora eran diez por nueve. Curiosamente ni Boca ni Boxing daban la sensación de conformarse con el empate, porque Boca de la mano del Sanjuanino con un toque distinto si se quiere empezó a dibujar por izquierda, secundado por Espeche, el Tigre que ya estaba en cancha, al ver a un Rogel tan “sacado” no protestaba ni una.
Jugada por derecha de Boxing lo bajan a un hombre albiverde, Rogel que no sanciona, la jugada sigue curso cerca de los bancos, Jancich va al piso, y Rogel pita falta, Gargaglione que de un salto ingresa al campo reclama airadamente al juez, este lo expulsa de inmediato, pero el técnico albiverde esta fuera de sí, Don Carlos se descontrola y hay agresión ya el partido se le ha ido totalmente de las manos al arbitro, Tito Velazquez, sigue el mismo camino de vestuario, cuando Rogel lo agrega a su lista de expulsados. Hay una chance más para Boxing en un ataque de Julián Ojeda por izquierda y hay una inmejorable ocasión desperdiciada por el sanjuanino Fernández para Boca, segundos antes que Rogel pitara el final.
Se van masticando bronca, los dos quisieron ganarlos, y eso es bueno, ninguno salió a especular, cada uno con sus planteos, cada uno con sus armas, validas todas.
Pudo ser para Boca, pudo ser para Boxing, ambos pusieron todo, con errores y virtudes.
El cambio radical de Rogel en la segunda parte, complico la vida de todos, ha tenido tardes buenas Rogel debo reconocerlo, como no puedo engañarme ni engañarlo a Ud señor lector, hoy Don David Rogel…. Tuvo una tarde de perros.
LA QUIMERA DE SANTA CRUZ
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