Los chicos de Boxing festejaron a lo grande

Instancia local de los Juegos Evita 2008: campeón en fútbol Sub 16

Una durísima batalla futbolística, con todos los condimentos de gran final, fue la que protagonizaron en la tarde de ayer los elencos Sub 16 de Unión Santacruceña y el Atlético Boxing Club. El resultado final (1 a 0 para los dirigido por Carlos Padín) da cuenta de que el dueño de casa logró sacar adelante el partido sin sobrarle nada, y bien expresa que en el duelo de ayer se midieron dos equipos de la misma talla deportiva. De todas maneras, los chicos del albiverde tuvieron el mérito de saber inclinar a su favor la balanza cuando las circunstancias apremiaban, sacando a relucir el oficio de campeón que tanto rédito le ha dado al histórico club. El desarrollo del partido estuvo marcado por una notable paridad entre los dos elencos, y recién sobre el cierre dio la sensación de que pusieron toda la carne al asador para generar alternativas de claro riesgo. Unión y Boxing estiraron el 0-0 hasta pasados los dos minutos del tiempo adicionado por el juez Guido Oyarzo, cuando el pibe Ignacio Averza decretó el 1-0 que ya no se modificaría. Vale decir que ni el delantero ni sus compañeros olvidarán la agónica anotación de ayer, que les significó a nada más y nada menos que la clasificación para la instancia provincial de los Juegos Evita 2008, que pone en danza un boleto para el encuentro nacional de Mar del Plata. Todo se vivió ayer con gran dramatismo en el “gigante verde”, donde se dio cita un buen número de padres e hinchas de los pibes de Unión Santacruceña y otro tanto de seguidores de los chicos de Boxing. Pese a lo ajustado de la victoria del plantel dirigido por Padín, el partido ofreció una interesante cuota de las emociones más diversas a los espectadores, que asistieron a un juego de alto voltaje y en el cual (como es habitual en otros niveles de competencia) ambos equipos dejaron en claro su voluntad de no perder. Los esquemas se empezaron a desmoronar sobre el final, cuando el tic tac del reloj acotaba el margen para cualquier tipo de especulación e invitaba a aventurarse en busca de un gol que, de conseguirse a esa altura, tendría un sabor muy parecido al de la victoria. En eso, a menos de cinco minutos de agotarse el tiempo reglamentario, se produjo la jugada que el partido necesitaba para pellizcar a los futbolistas y animarlos en la búsqueda de la victoria. Franco Donoso se escapó solo, de contra (el recurso táctico más utilizado por los unionistas), y cuando se aprestaba a resolver el mano a mano fuera del área con el arquero de Boxing, Fernando Sánchez, fue embestido por éste y cayó al piso. Todos pensaron en la expulsión del guardavallas, que venía con amarilla, pero el árbitro otorgó ley de ventaja y la jugada siguió con un remate al arco de otro de los delanteros del albinegro. En la confusión, uno de los defensores de boxing paró la pelota con la mano, creyendo que el juez había sancionado falta en la acción previa. El penal, ejecutado por Fernando Mazei, quedó en las manos del uno, que contuvo arrojándose bien sobre su derecha. Poco después, corriendo al menos dos minutos de tiempo adicional, un avance a toda velocidad de los pibes boxinguistas puso al delantero Ignacio Averza en situación inmejorable, para luego dar ese grito de gol que rápidamente se mezcló con los festejos por el triunfo. Es que Averza convirtió ante la presurosa salida del arquero Azcona cuando al partido no le quedaba nada y le dio así un durísimo golpe a las pretensiones unionistas de conseguir, al menos, una definición en tiempo suplementario. Boxing sacó así una victoria “de la galera”, con una buena dosis de paciencia y oportunismo, demostrando además que puede hacer frente a las situaciones difíciles (que, por otra parte, es probable que se le vuelvan a presentar). Por su lado, el equipo del joven club Unión Santacruceña -de apenas seis años de edad- demostró que está a la par del campeón y que pudo haberse alzado con la victoria, de contar con algo más de fortuna. Loable actuación de estos chicos que entrenan cómo y dónde pueden.
LA OPINION AUSTRAL
FOTO:ROMINA BARRIENTOS